miércoles, 7 de octubre de 2009

LA CARTA DE AMOR más hermosa...


Estimada Cristina:

Ayer recibí una misiva de tu Abogado donde me invitaba a enumerar los bienes comunes, con el fin de comenzar el proceso de disolución de nuestro vínculo matrimonial.

A continuación te remito dicha lista, para que puedas solicitar la certificación al Notario (...) y tener listos todos los escritos antes de la comparecencia ante el tribunal.

Como verás, he dividido la lista en dos partes. Básicamente, un apartado con las cosas de nuestros cinco años de matrimonio con las que me gustaría quedarme y otra con las que te puedes quedar tú. Para cualquier duda o comentario, ya sabes que puedes llamarme al teléfono de la oficina (de ocho a cuatro) o al móvil (hasta las once) y estaré encantado de repasar la lista contigo.


COSAS QUE DESEO CONSERVAR:

- La carne de gallina que salpicó mis antebrazos cuando te vi por primera vez en la oficina.
- El leve rastro de perfume que quedó flotando en el ascensor una mañana, cuando te bajaste en la segunda planta, y yo aún no me atrevía a dirigirte la palabra.
- El movimiento de cabeza con el que aceptaste mi invitación a cenar.
- La mancha de rimel que dejaste en mi almohada la noche que por fin dormimos juntos.
- La promesa de que yo sería el Único que besaría la constelación de pecas de tu pecho.
- El mordisco que dejé en tu hombro y tuviste que disimular con maquillaje porque tu vestido de novia tenía un escote de palabra de honor.
- Las gotas de lluvia que se enredaron en tu pelo durante nuestra luna de miel en Londres.
- Todas las horas que pasamos mirándonos, besándonos, hablando y tocándonos. (También las horas que pasé simplemente soñando o pensando en ti).


COSAS QUE PUEDES CONSERVAR TÚ:

- Los silencios.
- Aquellos besos tibios y emponzoñados, cuyo ingrediente principal era la rutina.
- El sabor acre de los insultos y reproches.
- La sensación de angustia al estirar la mano por la noche para descubrir que tu lado de la cama estaba vacío.
- Las nauseas que trepaban por mi garganta cada vez que notaba un olor extraño en tu ropa.
- El cosquilleo de mi sangre pudriéndose cada vez que te encerrabas en el baño a hablar por teléfono con él.
- Las lágrimas que me tragué cuando descubrí aquel arañazo ajeno en tu ingle.
- Jorge y Cecilia... Los nombres que nos gustaban para los hijos que nunca llegamos a tener.


Con respecto al resto de objetos que hemos adquirido y compartido durante nuestro matrimonio (el coche, la casa, etc) solo comunicarte que puedes quedártelos todos. Al fin y al cabo sólo son eso:... objetos.

Por último, recordarte el n º de teléfono de mi Abogado (.......) para que tu Letrado pueda contactar con él y ambos se ocupen de presentar el escrito de divorcio para ratificar nuestro convencimiento.

Afectuosamente,

Roberto.




NOTA: Ganadora del III Concurso Antonio Villalba de Cartas de Amor.


TIEMPO PARA APRENDER... de AR .-



Vaya Otoño que nos espera!. Núnca he oído tantas veces la palabra "crisis" en su acepción más negativa, aunque ésta palabra maldita tiene también un significado positivo. Es necesario tocar fondo, "hacer crisis" como las enfermedades, para poder empezar a remontar. Después de grandes hecatombes, llegan las grandes oportunidades, se encuentra el camino y dejamos atrás lo que no nos conviene. Porque los humanos somos bastante torpes y,e en ocasiones, tenemos que estrellarnos para enderezar el rumbo. Las crisis sociales y personales cambian el mundo y nuestra vida -y en general para mejor-, el problema es que mientras estamos metidos en esa convulsión se pasa fatal.

La sabiduría está en aprender. sacar conclusiones y no volver a cometer los mismos errores. Me encantan las personas que tienen claro lo que realmente es importante y lo que es baladí. Es todo lo que tenemos que saber para que nuestra vida sea más fácil y más bonita.


martes, 6 de octubre de 2009

El Otoño ha llegado,, suave y tranquilo...





El Otoño es una de las estaciones del año. Astronómicamente, comienza con el equinoccio de otoño (entre el 21 y el 23 de septiembre en el hemisferio norte y el 21 o el 20 de marzo, en el hemisferio sur), y termina con el solsticio de invierno (alrededor del 21 de diciembre en el hemisferio norte y del 21 de junio en el hemisferio sur).

Sin embargo, a veces es considerado como los meses enteros de septiembre, octubre y noviembre en el hemisferio norte y de marzo, abril y mayo en el hemisferio sur.

En ambos hemisferios, el Otoño es la estación de las cosechas de, por ej., el maíz y el girasol. En literatura el otoño, en sentido figurado, representa la vejez. Durante el otoño, las hojas de los árboles caducos cambian y su color verde se vuelve amarillento y amarronado, hasta que se secan y caen ayudadas por el viento que sopla con mayor fuerza. Desde esta estación la temperatura comienza a ser un poco fría.